martes, 10 de junio de 2008

546. Michael Johnson con los récords mundiales de los 200 (19.32) y 400 metros lisos (43.18), asienta que los hermanos Harrison han tomado drogas.


Michael Johnson celebra el titulo de 4x400

El espejo de tinta

Arturo Xicotencátl

Fin de una polémica

El tiempo y las circunstancias se han encargado de colocar las cosas en su sitio. El popular astro del atletismo estadunidense Michael Johnson, en un amplio artículo que apareció ayer en la edición de El País, ha decidido separar de sus vitrinas la polémica medalla de oro que el equipo de relevos del 4x400 de Estados Unidos ganó en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.

Se divulga una versión diferente a la que originalmente se dio a conocer uno o dos años después de la competencia, en el sentido de que Jerome Young había dado positivo y participado en las pruebas eliminatorias, lo que invalidaba la presencia del conjunto norteño de la final olímpica.

Con el actual positivo de Antonio Pettigrew, quien confirmó haber empleado hormonas del crecimiento y la eritropoyetina, EPO, el Comité Olímpico Internacional se desvancen las dudas, entonces la Federación Internacional de Asociaciones de Atletismo debe pronunciarse y retirar la medalla a los cuatro integrantes del relevo: Johnson, Pettrigrew y los hermanos Alvin y Calvin Harrison.

Johnson con los prestigosos récords mundiales de los 200 (19.32) y 400 metros lisos (43.18) asienta en el escrito que los hermanos Harrison han admitido haber consumido sustancias prohibidas.

La cuarteta pasó a la final empañada más tarde por el positivo de Young. La polémica surgió porque, aun cuando los cuatro finalistas estuviesen limpios de sustancias prohibidas, llegaban con la mancha de Young. Y desde ahí debió ocurrir la descalificación. Un juez dictaminó a favor de los cuatro atletas finalistas porque ninguno cometió falta y corrieron de buena fe y, por otra parte, el COI fue quien decidió sobre el caso. El argumento fue que Young había sido exonerado antes del trial.

Como se ve, es otro procedimiento diferente al que se siguió con las relevistas compañeras de Marion Jones que tuvieron que regresar las medallas del 4x100 metros lisos una vez que se confirmó el positivo de ésta.

Michael Johnson manifiesta su desilusión e intención de regresar la medalla. En realidad, en apego a los reglas del deporte, no es él sino el COI y la IAAF quienes tienen que desposeer al equipo de Estados Unidos del oro olímpico. No es desdoro para Michael Johnson, sino sencillamente la aplicación de las leyes deportivas.

La declaración oficial de Pettigrew descalifica al equipo del primer sitio. Y de esta manera son Nigeria, Jamaica y Bahamas las cuartetas que deben ser restituidas en los sitios oficiales de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000. Se entiende la situación moral de Michael Johnson de sentirse engañado y apenado de que uno o varios de sus compañeros y amigos se hayan dopado y que hayan sido descubiertos. Pero la decisión de la medalla no depende de su buena voluntad.

Será cuestión de tiempo, suponemos, para que Clement Chukwu,Jude Monye, Sunday Baba y Efefiok Udo-Obong, del conjunto de Nigeria, aparezcan como los campeones olímpicos una vez que se borre el nombre de Estados Unidos.

Por otra parte, el etíope Kenenisa Bekele no consiguió el domingo el alto propósito de romper su plusmarca mundial de los diez mil metros lisos en el Classic Prefontaine.

Su cuerpo no se sintió en forma. Aun así corrió la distancia en 26.25.97 que representa la cuarta mejor marca mundial de la distancia en una competencia en la que rompió el récord de la pista del legendario Henry Rono, plusmarquista mundial de tres mil steeplechase, cinco y diez mil metros. Rono tenía 27.29.90 en el Haywarfield.

Bekele rompió otra más, la del Prefontaine Classic, en poder del mexicano José Gómez en 27.56.74, cuando en 1983 derrotó nada menos que al prestigioso Alberto Salazar.

María Mutola, 35 años, ganó por decimosexta ocasión los 800 metros lisos (1.59.24) mientras que el pertiguista Brad Walter rompió con 6.04 metros el récord americano y del Prefontaine de Jeff Hartwig (6.03 metros) y Sergei Bubka (5.95 metros).

Fuente: exonline.com

ENLACE:

511. El etíope Kenenisa Bekele, triple campeón del mundo y olímpico en los 10.000 metros, no pudo batir el récord que ostenta en la distancia 26:17.5.

3 comentarios:

  1. Anónimo6/12/2008

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  2. Anónimo6/12/2008

    PERO ME PIERDO, CUANTOS AÑOS HAN PASADO???????.
    BESITOS

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  3. Anónimo6/12/2008

    Ocho años han pasado, bonita.
    Un beso

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